La participación activa de los jóvenes es crucial para enfrentar los embates de los problemas ambientales. Esto, implica abordar y gestionar los desafíos que surgen debido a la interacción negativa entre las actividades humanas y el medio ambiente. La participación de los jóvenes no solo es beneficiosa para sus comunidades, sino que también les permite desarrollar habilidades valiosas y contribuir a un futuro más sostenible.
Las tendencias recientes en materia de desertificación, degradación de las tierras y sequía tienen graves consecuencias económicas, sociales y de seguridad para la población joven actual y las generaciones futuras. Según la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), actualmente la generación joven es la más numerosa de la historia, estas
tendencias son particularmente preocupantes. En África subsahariana, Asia y América Latina viven más de la mitad de los jóvenes del mundo y experimentan altos niveles de degradación de las tierras y desertificación.
La Estrategia y Plan de Acción para la Participación de los Jóvenes (YES, por sus siglas en inglés), con su visión integral, principios rectores y objetivos estratégicos, es un plan de acción y muy útil como hoja de ruta para el papel de los jóvenes como actores clave en la gestión de las tierras, reconociendo su necesidad de adaptarse a las circunstancias nacionales y locales. Articula un futuro en el que los jóvenes no sólo sean participantes, sino agentes de cambio en la formulación de políticas que afectan sus vidas y las tierras.
Ascender a esta publicación por el enlace:
https://www.unccd.int/sites/default/files/2024-06/UNCCD%20Youth%20Strat…
