Este objetivo busca un cambio fundamental: pasar de responder a las crisis de sequía a una reducción proactiva y sostenible del riesgo, esto refiere a un cambio fundamental en la forma en que se aborda la sequía. En lugar de simplemente reaccionar una vez que la sequía ya está causando estragos, la idea es anticiparse y mitigar sus impactos antes de que se vuelvan catastróficos. ¿Cómo se logrará esto? Mediante la implementación de sistemas de alerta temprana y una gestión sostenible de las tierras.
En su conferencia inaugural, las partes interesadas alcanzaron acuerdos clave. Establecieron el marco para la gobernanza, definieron las vías de financiación y aseguraron el apoyo técnico necesario para asistir a los países más vulnerables.
De allí, Unidos contra la sequía desde la alianza de Riad pasa a la acción.